Is 28:23: Estad atentos, y oíd mi voz; atended, y oíd mi dicho.
Col 4:2: Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias;
Ap 3:7,8: Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:
3:8 Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre.
Jn 8:18: Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio de mí.
Gá 4:18: Bueno es mostrar celo en lo bueno siempre, y no solamente cuando estoy presente con vosotros.
Tit 1:16: Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.
Gá 5:16,17: Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.
5:17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.
Jer 2:23,24: ¿Cómo puedes decir: No soy inmunda, nunca anduve tras los baales? Mira tu proceder en el valle, conoce lo que has hecho, dromedaria ligera que tuerce su camino,
2:24 asna montés acostumbrada al desierto, que en su ardor olfatea el viento. De su lujuria, ¿quién la detendrá? Todos los que la buscaren no se fatigarán, porque en el tiempo de su celo la hallarán.
Lc 12:35: Estén ceñidos vuestros lomos, y vuestras lámparas encendidas;
1 Co 6:17: Pero el que se une al Señor, un espíritu es con él.
Is 43:18,19: No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas.43:19 He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad.
He 1:14: ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?
Is 40:3: Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.
Dt 6:25: Y tendremos justicia cuando cuidemos de poner por obra todos estos mandamientos delante de Jehová nuestro Dios, como él nos ha mandado.
Mi 6:8: Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.
Jn 6:63: El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
Hch 5:32. Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.
Ap 22:2: En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones.
Ro 3:22: la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia,
Ro 8:3: Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne;
Sal 18:5,6: Ligaduras del Seol me rodearon,
Me tendieron lazos de muerte.
18:6 En mi angustia invoqué a Jehová,
Y clamé a mi Dios.
El oyó mi voz desde su templo,
Y mi clamor llegó delante de él, a sus oídos.
Lc 15:4-6: ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?
15:5 Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso;
15:6 y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido.
Sal 23:1-4: Jehová es mi pastor; nada me faltará.
23:2 En lugares de delicados pastos me hará descansar;
Junto a aguas de reposo me pastoreará.
23:3 Confortará mi alma;
Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
Job 14:7-12: Porque si el árbol fuere cortado, aún queda de él esperanza;
Retoñará aún, y sus renuevos no faltarán.
14:8 Si se envejeciere en la tierra su raíz,
Y su tronco fuere muerto en el polvo,
14:9 Al percibir el agua reverdecerá,
Y hará copa como planta nueva.
14:10 Mas el hombre morirá, y será cortado;
Perecerá el hombre, ¿y dónde estará él?
14:11 Como las aguas se van del mar,
Y el río se agota y se seca,
14:12 Así el hombre yace y no vuelve a levantarse;
Hasta que no haya cielo, no despertarán,
Ni se levantarán de su sueño.
Dt 6:6: Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
Pr 7:1-3: Hijo mío, guarda mis razones,
Y atesora contigo mis mandamientos.
7:2 Guarda mis mandamientos y vivirás,
Y mi ley como las niñas de tus ojos.
7:3 Lígalos a tus dedos;
Escríbelos en la tabla de tu corazón.
Ef 5:14: Por lo cual dice:
Despiértate, tú que duermes,
Y levántate de los muertos,
Y te alumbrará Cristo.
Ap 2:4: Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor.
Jer 4:1,2: Si te volvieres, oh Israel, dice Jehová, vuélvete a mí. Y si quitares de delante de mí tus abominaciones, y no anduvieres de acá para allá,
4:2 y jurares: Vive Jehová, en verdad, en juicio y en justicia, entonces las naciones serán benditas en él, y en él se gloriarán.
Jn 11:40: Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
Jer 30:11: Porque yo estoy contigo para salvarte, dice Jehová, y destruiré a todas las naciones entre las cuales te esparcí; pero a ti no te destruiré, sino que te castigaré con justicia; de ninguna manera te dejaré sin castigo.
He 10:39: Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.
Sal 63:1: Dios, Dios mío eres tú;
De madrugada te buscaré;
Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela,
En tierra seca y árida donde no hay aguas,
Mr 16:16: El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.
1 P 2:9: Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;
Neh 8:10: Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.
2 Ti 4:2: que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.
Col 4:6: Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno.
Mr 8:38: Porque el que se avergonzare de mí y de mis palabras en esta generación adúltera y pecadora, el Hijo del Hombre se avergonzará también de él, cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles.
1 Ti 4:13: Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza.
Col 4:3-5: orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso,
4:4 para que lo manifieste como debo hablar.
4:5 Andad sabiamente para con los de afuera, redimiendo el tiempo.
Jn 1:16: Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.
Mi 2:13: Subirá el que abre caminos delante de ellos; abrirán camino y pasarán la puerta, y saldrán por ella; y su rey pasará delante de ellos, y a la cabeza de ellos Jehová.
2 Ts 3:1: Por lo demás, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra del Señor corra y sea glorificada, así como lo fue entre vosotros,
Sal 81:10: Yo soy Jehová tu Dios,
Que te hice subir de la tierra de Egipto;
Abre tu boca, y yo la llenaré.
Stg 1:27: La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
Jn 14:6: Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
1 Jn 2:27: Pero la unción que vosotros recibisteis de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; así como la unción misma os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, según ella os ha enseñado, permaneced en él.
Sal 139:15-17: No fue encubierto de ti mi cuerpo,
Bien que en oculto fui formado,
Y entretejido en lo más profundo de la tierra.
139:16 Mi embrión vieron tus ojos,
Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas
Que fueron luego formadas,
Sin faltar una de ellas.
139:17 ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos!
¡Cuán grande es la suma de ellos!
Jn 11:25,26: Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
11:26 Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?
Jn 6:22: Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.
Jn 10:17,18: Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar.
10:18 Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.
Lc 7:11-15: Aconteció después, que él iba a la ciudad que se llama Naín, e iban con él muchos de sus discípulos, y una gran multitud.
7:12 Cuando llegó cerca de la puerta de la ciudad, he aquí que llevaban a enterrar a un difunto, hijo único de su madre, la cual era viuda; y había con ella mucha gente de la ciudad.
7:13 Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores.
7:14 Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate.
7:15 Entonces se incorporó el que había muerto, y comenzó a hablar. Y lo dio a su madre.
Jn 8:12: Otra vez Jesús les habló, diciendo:Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
Dn 10:5,6: Y alcé mis ojos y miré, y he aquí un varón vestido de lino, y ceñidos sus lomos de oro de Ufaz.
10:6 Su cuerpo era como de berilo, y su rostro parecía un relámpago, y sus ojos como antorchas de fuego, y sus brazos y sus pies como de color de bronce bruñido, y el sonido de sus palabras como el estruendo de una multitud.
Ap 15:2: Vi también como un mar de vidrio mezclado con fuego; y a los que habían alcanzado la victoria sobre la bestia y su imagen, y su marca y el número de su nombre, en pie sobre el mar de vidrio, con las arpas de Dios.
Ap 4:8: Y los cuatro seres vivientes tenían cada uno seis alas, y alrededor y por dentro estaban llenos de ojos; y no cesaban día y noche de decir: Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso, el que era, el que es, y el que ha de venir.
Hab 3:4: Y el resplandor fue como la luz;
Rayos brillantes salían de su mano,
Y allí estaba escondido su poder.
Ap 4:3-5: Y el aspecto del que estaba sentado era semejante a piedra de jaspe y de cornalina; y había alrededor del trono un arco iris, semejante en aspecto a la esmeralda.
4:4 Y alrededor del trono había veinticuatro tronos; y vi sentados en los tronos a veinticuatro ancianos, vestidos de ropas blancas, con coronas de oro en sus cabezas.
4:5 Y del trono salían relámpagos y truenos y voces; y delante del trono ardían siete lámparas de fuego, las cuales son los siete espíritus de Dios.
Ef 4:25,29: Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. 29: Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.
Lc 6:45: El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca.
Ez 33:22: Y la mano de Jehová había sido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado.
1 Co 9:16: Pues si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio!
Hch 3:6: Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.
Sal 147:15-18: El envía su palabra a la tierra;
Velozmente corre su palabra.
147:16 Da la nieve como lana,
Y derrama la escarcha como ceniza.
147:17 Echa su hielo como pedazos;
Ante su frío, ¿quién resistirá?
147:18 Enviará su palabra, y los derretirá;
Soplará su viento, y fluirán las aguas.
Hch 16:30,31: y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?
16:31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.
Ez 47:8,9: Y me dijo: Estas aguas salen a la región del oriente, y descenderán al Arabá, y entrarán en el mar; y entradas en el mar, recibirán sanidad las aguas.
47:9 Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos ríos, vivirá; y habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, y recibirán sanidad; y vivirá todo lo que entrare en este río.
Sal 35:17: Señor, ¿hasta cuándo verás esto?
Rescata mi alma de sus destrucciones, mi vida de los leones.
Is 6:5-7: Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.
6:6 Y voló hacia mí uno de los serafines, teniendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar con unas tenazas;
6:7 y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu pecado.
Mt 23:13: Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando.
Stg 5:14: ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.
Sal 94:9,10: El que hizo el oído, ¿no oirá?
El que formó el ojo, ¿no verá?
94:10 El que castiga a las naciones, ¿no reprenderá?
¿No sabrá el que enseña al hombre la ciencia?
Éx 2:23-25: Aconteció que después de muchos días murió el rey de Egipto, y los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, y clamaron; y subió a Dios el clamor de ellos con motivo de su servidumbre.
2:24 Y oyó Dios el gemido de ellos, y se acordó de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob.
2:25 Y miró Dios a los hijos de Israel, y los reconoció Dios.
2 Ti 1:7: Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
Hch 8:22: Arrepiéntete, pues, de esta tu maldad, y ruega a Dios, si quizás te sea perdonado el pensamiento de tu corazón;
1 Ts 3:10: orando de noche y de día con gran insistencia, para que veamos vuestro rostro, y completemos lo que falte a vuestra fe?
1 Ti 4:16,17: Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos.
4:16 Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren.
Mt 28:19,20: Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
28:20 enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Pr 16:3: Encomienda a Jehová tus obras,
Y tus pensamientos serán afirmados.
2 R 4:29: Entonces dijo él a Giezi: Ciñe tus lomos, y toma mi báculo en tu mano, y ve; si alguno te encontrare, no lo saludes, y si alguno te saludare, no le respondas; y pondrás mi báculo sobre el rostro del niño.
1 R 13:8,9: Pero el varón de Dios dijo al rey: Aunque me dieras la mitad de tu casa, no iría contigo, ni comería pan ni bebería agua en este lugar.
13:9 Porque así me está ordenado por palabra de Jehová, diciendo: No comas pan, ni bebas agua, ni regreses por el camino que fueres.
Nah 1:15: He aquí sobre los montes los pies del que trae buenas nuevas, del que anuncia la paz. Celebra, oh Judá, tus fiestas, cumple tus votos; porque nunca más volverá a pasar por ti el malvado; pereció del todo.
Sal 45:2: Eres el más hermoso de los hijos de los hombres;
La gracia se derramó en tus labios;
Por tanto, Dios te ha bendecido para siempre.
Jos 9:25-27: Ahora, pues, henos aquí en tu mano; lo que te pareciere bueno y recto hacer de nosotros, hazlo.
9:26 Y él lo hizo así con ellos; pues los libró de la mano de los hijos de Israel, y no los mataron.
9:27 Y Josué los destinó aquel día a ser leñadores y aguadores para la congregación, y para el altar de Jehová en el lugar que Jehová eligiese, lo que son hasta hoy.
Lc 8:16: Nadie que enciende una luz la cubre con una vasija, ni la pone debajo de la cama, sino que la pone en un candelero para que los que entran vean la luz.
Ec 4:12: Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.
Lm 4:2: Los hijos de Sion, preciados y estimados más que el oro puro,
¡Cómo son tenidos por vasijas de barro, obra de manos de alfarero!
Lc 10:5-7,10,11: En cualquier casa donde entréis, primeramente decid: Paz sea a esta casa.
10:6 Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; y si no, se volverá a vosotros.
10:7 Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que os den; porque el obrero es digno de su salario. No os paséis de casa en casa.
10 Mas en cualquier ciudad donde entréis, y no os reciban, saliendo por sus calles, decid:
10:11 Aun el polvo de vuestra ciudad, que se ha pegado a nuestros pies, lo sacudimos contra vosotros. Pero esto sabed, que el reino de Dios se ha acercado a vosotros.
Mt 11:6: y bienaventurado es el que no halle tropiezo en mí.
Col 3:17: Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dandogracias a Dios Padre por medio de él.
Lc 19:40: El, respondiendo, les dijo: Os digo que si éstos callaran, las piedras clamarían.
Is 65:1: Fui buscado por los que no preguntaban por mí; fui hallado por los que no me buscaban. Dije a gente que no invocaba mi nombre: Heme aquí, heme aquí.
2 Co 5:10: Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.
Esd 7:10: Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos.
Mt 24:15. Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda),
Jn 1:1-3: En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
1:2 Este era en el principio con Dios.
1:3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
He 11:6: Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Lc 17:5: Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fe.
Sal 25:3: Ciertamente ninguno de cuantos esperan en ti será confundido;
Serán avergonzados los que se rebelan sin causa.
Fil 4:19: Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.
Stg 2:26: Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta.
He 11:1: Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
1 Ti 5:8: porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
Jl 2:12: Por eso pues, ahora, dice Jehová, convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento.
Jue 4:8: Barac le respondió: Si tú fueres conmigo, yo iré; pero si no fueres conmigo, no iré.
Ap 6:4: Y salió otro caballo, bermejo;y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada.
Ap 9:7-11: El aspecto de las langostas era semejante a caballos preparados para la guerra; en las cabezas tenían como coronas de oro; sus caras eran como caras humanas;
9:8 tenían cabello como cabello de mujer; sus dientes eran como de leones;
9:9 tenían corazas como corazas de hierro; el ruido de sus alas era como el estruendo de muchos carros de caballos corriendo a la batalla;
9:10 tenían colas como de escorpiones, y también aguijones; y en sus colas tenían poder para dañar a los hombres durante cinco meses.
9:11 Y tienen por rey sobre ellos al ángel del abismo, cuyo nombre en hebreo es Abadón, y en griego, Apolión.
Ro 4:3: Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia.
Ez 9:4: y le dijo Jehová: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella.
Jn 15:20: Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra.
Ap 7:3: diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios.
Pr 22:3: El avisado ve el mal y se esconde;
Mas los simples pasan y reciben el daño.
2 Cr 7:14: Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.
Hch 16:30,31: y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?
16:31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.