Am 4:12: Por tanto, de esta manera te haré a ti, oh Israel; y porque te he de hacer esto, prepárate para venir al encuentro de tu Dios, oh Israel.
He 4:12: Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
Is 8:8: y pasando hasta Judá, inundará y pasará adelante, y llegará hasta la garganta; y extendiendo sus alas, llenará la anchura de tu tierra, oh Emanuel.
Lc 19:5: Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.
Ro 16:16: Saludaos los unos a los otros con ósculo santo. Os saludan todas las iglesias de Cristo.
Jer 22:29: ¡Tierra, tierra, tierra! oye palabra de Jehová.
Ez 36:25: Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré.
Lv 24:2: Manda a los hijos de Israel que te traigan para el alumbrado aceite puro de olivas machacadas, para hacer arder las lámparas continuamente.
Is 9:6: Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
Fil 4:19: Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.
1 Ti 1:5: Pues el propósito de este mandamiento es el amor nacido de corazón limpio, y de buena conciencia, y de fe no fingida,
Is 54:2: Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas.
Lc 14:33: Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.
Hch 3:19: Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio,
Ef 4:13: hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;
Pr 11:1: El peso falso es abominación a Jehová;
Mas la pesa cabal le agrada.
Sal 51:10: Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,
Y renueva un espíritu recto dentro de mí.
Ef 2:1-3: Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,
2:2 en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia,
2:3 entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.
Mt 5:3: Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Col 3:1,2: Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
3:2 Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Ap 3:17: Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.
Lc 12:16-21: También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho.
12:17 Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos?
12:18 Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes;
12:19 y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.
12:20 Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?
12:21 Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.
Ro 8:28: Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
Fil 3:19: el fin de los cuales será perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su vergüenza; que sólo piensan en lo terrenal.
Hch 7:51: ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros.
He 5:12-14: Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido.
5:13 Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño;
5:14 pero el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.
2 P 1:5-8: vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;
1:6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad;
1:7 a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
1:8 Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.
Sal 68:3,4: Mas los justos se alegrarán; se gozarán delante de Dios,
Y saltarán de alegría.
68:4 Cantad a Dios, cantad salmos a su nombre;
Exaltad al que cabalga sobre los cielos.
JAH es su nombre; alegraos delante de él.
Mt 6:33,34: Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
6:34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Fil 3:19: el fin de los cuales será perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su vergüenza; que sólo piensan en lo terrenal.
1 Co 2:13: lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.
Ap 3:20: He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
Is 28:23: Estad atentos, y oíd mi voz; atended, y oíd mi dicho.
Is 26:2: Abrid las puertas, y entrará la gente justa, guardadora de verdades.
Is 40:30,31: Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen;
40:31 pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
Lc 1:47: Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador.
Mr 3:35: Porque todo aquel que hace la voluntad de Dios, ése es mi hermano, y mi hermana, y mi madre.
2 Co 4:18: no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.
Mal 4:2: Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.
Sal 142:7: Saca mi alma de la cárcel, para que alabe tu nombre; Me rodearán los justos,
Porque tú me serás propicio.
Dt 4:9: Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.
Mr 16:16: El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.
Sal 73:25: ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti?
Y fuera de ti nada deseo en la tierra.
Lc 8:11-15: Esta es, pues, la parábola: La semilla es la palabra de Dios.
8:12 Y los de junto al camino son los que oyen, y luego viene el diablo y quita de su corazón la palabra, para que no crean y se salven.
8:13 Los de sobre la piedra son los que habiendo oído, reciben la palabra con gozo; pero éstos no tienen raíces; creen por algún tiempo, y en el tiempo de la prueba se apartan.
8:14 La que cayó entre espinos, éstos son los que oyen, pero yéndose, son ahogados por los afanes y las riquezas y los placeres de la vida, y no llevan fruto.
8:15 Mas la que cayó en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con perseverancia.
He 10:25:no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.
Am 5:4: Pero así dice Jehová a la casa de Israel: Buscadme, y viviréis;
Fil 4:11,12: No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación.
4:12 Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
1 Co 10:14: Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.
1 Co 6:15-17: ¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré, pues, los miembros de Cristo y los haré miembros de una ramera? De ningún modo.
6:16 ¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es un cuerpo con ella? Porque dice: Los dos serán una sola carne.
6:17 Pero el que se une al Señor, un espíritu es con él.
Ec 8:2,3: Te aconsejo que guardes el mandamiento del rey y la palabra del juramento de Dios.
8:3 No te apresures a irte de su presencia, ni en cosa mala persistas; porque él hará todo lo que quiere.
Gá 6:9: No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.
Jn 20:27-29: Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.
20:28 Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!
20:29 Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.
Mt 21:21,22: Respondiendo Jesús, les dijo: De cierto os digo, que si tuviereis fe, y no dudareis, no sólo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijereis: Quítate y échate en el mar, será hecho.
21:22 Y todo lo que pidiereis en oración, creyendo, lo recibiréis.
Hch 16:30,31: y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?
16:31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.
He 10:39: Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.
Ez 12:28: Diles, por tanto: Así ha dicho Jehová el Señor: No se tardará más ninguna de mis palabras, sino que la palabra que yo hable se cumplirá, dice Jehová el Señor.
Fil 4:4: Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!
Ro 2:13: porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados.
Hag 1:5: Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros caminos.
Ro 8:37: Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Job 30:8: Hijos de viles, y hombres sin nombre,
Más bajos que la misma tierra.
Gn 18:27: Y Abraham replicó y dijo: He aquí ahora que he comenzado a hablar a mi Señor, aunque soy polvo y ceniza.
Sal 100:3: Reconoced que Jehová es Dios;
El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos;
Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.
Jn 11:40: Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
Sal 24:8: ¿Quién es este Rey de gloria?
Jehová el fuerte y valiente,
Jehová el poderoso en batalla.
Sal 78:3-8: Las cuales hemos oído y entendido;
Que nuestros padres nos las contaron.
78:4 No las encubriremos a sus hijos,
Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová,
Y su potencia, y las maravillas que hizo.
78:5 El estableció testimonio en Jacob,
Y puso ley en Israel,
La cual mandó a nuestros padres
Que la notificasen a sus hijos;
78:6 Para que lo sepa la generación venidera, y los hijos que nacerán;
Y los que se levantarán lo cuenten a sus hijos,
78:7 A fin de que pongan en Dios su confianza,
Y no se olviden de las obras de Dios;
Que guarden sus mandamientos,
78:8 Y no sean como sus padres,
Generación contumaz y rebelde;
Generación que no dispuso su corazón,
Ni fue fiel para con Dios su espíritu.
2 Ti 4:2: que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.
Neh 8:10: Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.
Lc 12:48: Mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco; porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá.
Mt 5:40-42: y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
5:41 y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos.
5:42 Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
Mt 8:23-27: Y entrando él en la barca, sus discípulos le siguieron.
8:24 Y he aquí que se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía.
8:25 Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: ¡Señor, sálvanos, que perecemos!
8:26 El les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.
8:27 Y los hombres se maravillaron, diciendo: ¿Qué hombre es éste, que aun los vientos y el mar le obedecen?
Cnt 4:16: Levántate, Aquilón, y ven, Austro;
Soplad en mi huerto, despréndanse sus aromas.
Venga mi amado a su huerto,
Y coma de su dulce fruta.
Nm 11:31: Y vino un viento de Jehová, y trajo codornices del mar, y las dejó sobre el campamento, un día de camino a un lado, y un día de camino al otro, alrededor del campamento, y casi dos codos sobre la faz de la tierra.
Éx 10:13,19: Y extendió Moisés su vara sobre la tierra de Egipto, y Jehová trajo un viento oriental sobre el país todo aquel día y toda aquella noche; y al venir la mañana el viento oriental trajo la langosta. 19 Entonces Jehová trajo un fortísimo viento occidental, y quitó la langosta y la arrojó en el Mar Rojo; ni una langosta quedó en todo el país de Egipto.
Job 38:11: Y dije: Hasta aquí llegarás, y no pasarás adelante,
Y ahí parará el orgullo de tus olas?
Sal 141:3: Pon guarda a mi boca, oh Jehová;
Guarda la puerta de mis labios.
1 Ti 2:1-3: Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres;
2:2 por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.
2:3 Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador,
Dn 2:21: El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos.
Lc 18:7,8: ¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?
18:8 Os digo que pronto les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?
Sal 8:2: De la boca de los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza,
A causa de tus enemigos,
Para hacer callar al enemigo y al vengativo.
Hch 10:34,35: Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas,
10:35 sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia.
Lc 9:56: porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas. Y se fueron a otra aldea.
Sal 23:6: Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,
Y en la casa de Jehová moraré por largos días.
Mt 9:12,13: Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.
9:13 Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.
Jon 3:6-9: Y llegó la noticia hasta el rey de Nínive, y se levantó de su silla, se despojó de su vestido, y se cubrió de cilicio y se sentó sobre ceniza.
3:7 E hizo proclamar y anunciar en Nínive, por mandato del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres y animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni beban agua;
3:8 sino cúbranse de cilicio hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente; y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña que hay en sus manos.
3:9 ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y no pereceremos?
Sal 24:10: ¿Quién es este Rey de gloria?
Jehová de los ejércitos,
El es el Rey de la gloria. Selah
Ap 21:2: Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.
Pr 8:17: Yo amo a los que me aman,
Y me hallan los que temprano me buscan.
2 Ts 3:10: Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.
Gá 5:16,17: Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.
5:17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.
1 Co 15:50-54: Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción.
15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados,
15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
15:53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad.
15:54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria.
Pr 6:9-11: Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir?
¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
6:10 Un poco de sueño, un poco de dormitar,
Y cruzar por un poco las manos para reposo;
6:11 Así vendrá tu necesidad como caminante,
Y tu pobreza como hombre armado.
1 Ts 5:18: Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
Gn 15:4-6: Luego vino a él palabra de Jehová, diciendo: No te heredará éste, sino un hijo tuyo será el que te heredará.
15:5 Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: Así será tu descendencia.
15:6 Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia.
Mt 25:26-28: Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.
25:27 Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses.
25:28 Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos.
Lc 8:18: Mirad, pues, cómo oís; porque a todo el que tiene, se le dará; y a todo el que no tiene, aun lo que piensa tener se le quitará.
Sal 48:14: Porque este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre;
El nos guiará aun más allá de la muerte.
Ez 3:1,2: Me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a la casa de Israel.
3:2 Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo.
Is 7:15,16: Comerá mantequilla y miel, hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno.
7:16 Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, la tierra de los dos reyes que tú temes será abandonada.
He 11:6: Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Ap 10:10: Entonces tomé el librito de la mano del ángel, y lo comí; y era dulce en mi boca como la miel, pero cuando lo hube comido, amargó mi vientre.
Jn 16:21: La mujer cuando da a luz, tiene dolor, porque ha llegado su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el mundo.
Ec 11:5: Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.
Sal 77:12: Meditaré en todas tus obras, Y hablaré de tus hechos.
Ez 33:22: Y la mano de Jehová había sido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado.
Sal 78:29: Comieron, y se saciaron;
Les cumplió, pues, su deseo.
1 Co 2:16: Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
Jn 13:7: Respondió Jesús y le dijo: Lo que yo hago, tú no lo comprendes ahora; mas lo entenderás después.
Sal 16:11: Me mostrarás la senda de la vida;
En tu presencia hay plenitud de gozo;
Delicias a tu diestra para siempre.
Ap 4:11: Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas.
Lc 19:38: diciendo: ¡Bendito el rey que viene en el nombre del Señor; paz en el cielo, y gloria en las alturas!
Ap 3:7: Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre: