Hb 2.13 Y otra vez:
Yo confiaré en él.
Y de nuevo:
He aquí, yo y los hijos que Dios me dio.
Mt 6.33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Pr 14.12 Hay camino que al hombre le parece derecho;
Pero su fin es camino de muerte.
Jn 14.6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Miq 2.13 Subirá el que abre caminos delante de ellos; abrirán camino y pasarán la puerta, y saldrán por ella; y su rey pasará delante de ellos, y a la cabeza de ellos Jehová.
2 p 1.5-8 vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;
6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad;
7 a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
8 Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.
Ef 5.18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,
1 cor 6.9,10 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.
Isa 24.9 No beberán vino con cantar; la sidra les será amarga a los que la bebieren.
Isa 28.1 ¡Ay de la corona de soberbia de los ebrios de Efraín, y de la flor caduca de la hermosura de su gloria, que está sobre la cabeza del valle fértil de los aturdidos del vino!
Isa 29.9 Deteneos y maravillaos; ofuscaos y cegaos; embriagaos, y no de vino; tambalead, y no de sidra.
Sal 104.15 Y el vino que alegra el corazón del hombre,
El aceite que hace brillar el rostro,
Y el pan que sustenta la vida del hombre.
Jn 2.9,10 Cuando el maestresala probó el agua hecha vino, sin saber él de dónde era, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo,
10 y le dijo: Todo hombre sirve primero el buen vino, y cuando ya han bebido mucho, entonces el inferior; mas tú has reservado el buen vino hasta ahora.
1 tim 5.23 Ya no bebas agua, sino usa de un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades.
Col 3.13 soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
Ef 2.19 Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios,
1 tes 5.25 Hermanos, orad por nosotros.
Ezq 33.22 Y la mano de Jehová había sido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado.
Isa 55.6,7 Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.
7 Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.
Mal 4.6 El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición.
1 cor 4.5 Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.
Ef 4.31,32 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia.
32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
3 jn 1.11 Amado, no imites lo malo, sino lo bueno. El que hace lo bueno es de Dios; pero el que hace lo malo, no ha visto a Dios.
Ef 4.27 ni deis lugar al diablo.
Stg 4.7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.
Rom 4.17 (como está escrito: Te he puesto por padre de muchas gentes) delante de Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no son, como si fuesen.
Rom 10.10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
Jos 1.9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
Fil 4.13 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
Lev 19.3 Cada uno temerá a su madre y a su padre, y mis días de reposo guardaréis. Yo Jehová vuestro Dios.
1 cor 7.22 Porque el que en el Señor fue llamado siendo esclavo, liberto es del Señor; asimismo el que fue llamado siendo libre, esclavo es de Cristo.
Rom 6.13 ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia.
Hch 16.30,31 y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?
31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.
Gn 7.1 Dijo luego Jehová a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca; porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación.
2 cor 3.17 Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
Rom 8.37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Jn 5.24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
Mar 5.36 Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía, dijo al principal de la sinagoga: No temas, cree solamente.
Jn 11.40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
1 cor 10.13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
Tit 2.7,8 presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad,
8 palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence, y no tenga nada malo que decir de vosotros.
2 cor 5.17 (porque por fe andamos, no por vista);
Pr 12.4 La mujer virtuosa es corona de su marido;
Mas la mala, como carcoma en sus huesos.
1 p 3.1-7 Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas,
2 considerando vuestra conducta casta y respetuosa.
3 Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos,
4 sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios.
5 Porque así también se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus maridos;
6 como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza.
7 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.
Pr 21. 19 Mejor es morar en tierra desierta
Que con la mujer rencillosa e iracunda.
Ef 5.22-33 Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;
23 porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador.
24 Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.
25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella,
26 para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra,
27 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.
28 Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.
29 Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia,
30 porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.
31 Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne.
32 Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia.
33 Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.
Pr 6.24-26 Para que te guarden de la mala mujer,
De la blandura de la lengua de la mujer extraña.
25 No codicies su hermosura en tu corazón,
Ni ella te prenda con sus ojos;
26 Porque a causa de la mujer ramera el hombre es reducido a un bocado de pan;
Y la mujer caza la preciosa alma del varón.
Pr 5 1 Hijo mío, está atento a mi sabiduría,
Y a mi inteligencia inclina tu oído,
2 Para que guardes consejo,
Y tus labios conserven la ciencia.
3 Porque los labios de la mujer extraña destilan miel,
Y su paladar es más blando que el aceite;
4 Mas su fin es amargo como el ajenjo,
Agudo como espada de dos filos.
5 Sus pies descienden a la muerte;
Sus pasos conducen al Seol.
6 Sus caminos son inestables; no los conocerás,
Si no considerares el camino de vida.
7 Ahora pues, hijos, oídme,
Y no os apartéis de las razones de mi boca.
8 Aleja de ella tu camino,
Y no te acerques a la puerta de su casa;
9 Para que no des a los extraños tu honor,
Y tus años al cruel;
10 No sea que extraños se sacien de tu fuerza,
Y tus trabajos estén en casa del extraño;
11 Y gimas al final,
Cuando se consuma tu carne y tu cuerpo,
12 Y digas: ¡Cómo aborrecí el consejo,
Y mi corazón menospreció la reprensión;
13 No oí la voz de los que me instruían,
Y a los que me enseñaban no incliné mi oído!
14 Casi en todo mal he estado,
En medio de la sociedad y de la congregación.
15 Bebe el agua de tu misma cisterna,
Y los raudales de tu propio pozo.
16 ¿Se derramarán tus fuentes por las calles,
Y tus corrientes de aguas por las plazas?
17 Sean para ti solo,
Y no para los extraños contigo.
18 Sea bendito tu manantial,
Y alégrate con la mujer de tu juventud,
19 Como cierva amada y graciosa gacela.
Sus caricias te satisfagan en todo tiempo,
Y en su amor recréate siempre.
20 ¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la mujer ajena,
Y abrazarás el seno de la extraña?
21 Porque los caminos del hombre están ante los ojos de Jehová,
Y él considera todas sus veredas.
22 Prenderán al impío sus propias iniquidades,
Y retenido será con las cuerdas de su pecado.
23 El morirá por falta de corrección,
Y errará por lo inmenso de su locura.
Gn 2.24 Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
1 tes 4.2 Porque ya sabéis qué instrucciones os dimos por el Señor Jesús;
Pr 18.22 El que halla esposa halla el bien,
Y alcanza la benevolencia de Jehová.
2 tim 2.15 rocura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.
Pr 22.6 Instruye al niño en su camino,
Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
2 tes 3.10 Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma.
Jn 13.15 Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.
1 p 1.18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,
1 cor 14.40 pero hágase todo decentemente y con orden.
Pr 15.1 La blanda respuesta quita la ira;
Mas la palabra áspera hace subir el furor.
Col 3.18-23 Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.
19 Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas.
20 Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.
21 Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.
22 Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales, no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino con corazón sincero, temiendo a Dios.
23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;
1 tes 3.10 orando de noche y de día con gran insistencia, para que veamos vuestro rostro, y completemos lo que falte a vuestra fe?
1 p 4.7 Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración.
Rom 13.7-9 Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra.
8 No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley.
9 Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
1 tim 5.8 porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
Ef 6.1-4 Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo.
2 Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa;
3 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.
4 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.
Sal 128 Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová,
Que anda en sus caminos.
2 Cuando comieres el trabajo de tus manos,
Bienaventurado serás, y te irá bien.
3 Tu mujer será como vid que lleva fruto a los lados de tu casa;
Tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa.
4 He aquí que así será bendecido el hombre
Que teme a Jehová.
5 Bendígate Jehová desde Sion,
Y veas el bien de Jerusalén todos los días de tu vida,
6 Y veas a los hijos de tus hijos.
Paz sea sobre Israel.
Sal 127.3-5 He aquí, herencia de Jehová son los hijos;
Cosa de estima el fruto del vientre.
4 Como saetas en mano del valiente,
Así son los hijos habidos en la juventud.
5 Bienaventurado el hombre que llenó su aljaba de ellos;
No será avergonzado
Cuando hablare con los enemigos en la puerta.
Pr 27.15 Gotera continua en tiempo de lluvia
Y la mujer rencillosa, son semejantes;
Sal 133.1 ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es
Habitar los hermanos juntos en armonía!
Sal 27.10 Aunque mi padre y mi madre me dejaran,
Con todo, Jehová me recogerá.
Ef 4.22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,
Rut 3.5 Y ella respondió: Haré todo lo que tú me mandes.
Tit 2.3-6 Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien;
4 que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos,
5 a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.
6 Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes;
Tit 1.6 el que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía.
Hch 14.23 Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.
1 tes 5.16-19 Estad siempre gozosos.
17 Orad sin cesar.
18 Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
19 No apaguéis al Espíritu.
1 tim 2.15 Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia.
1 tim 5.2,3,7,10 a las ancianas, como a madres; a las jovencitas, como a hermanas, con toda pureza.
3 Honra a las viudas que en verdad lo son.
7 Manda también estas cosas, para que sean irreprensibles;
10 que tenga testimonio de buenas obras; si ha criado hijos; si ha practicado la hospitalidad; si ha lavado los pies de los santos; si ha socorrido a los afligidos; si ha practicado toda buena obra.
Jn 13.34 Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.
Gal 5.14 Porque toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Isa 49.15 ¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti.
1 jn 4.20,21 Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?
21 Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.
2 cor 5.17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Hb 11.1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
Rom 14.23 Pero el que duda sobre lo que come, es condenado, porque no lo hace con fe; y todo lo que no proviene de fe, es pecado
Jn 8.32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Sal 34.13,14 Guarda tu lengua del mal,
Y tus labios de hablar engaño.
14 Apártate del mal, y haz el bien;
Busca la paz, y síguela.
Ef 6.18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;
Jue 6.12 Y el ángel de Jehová se le apareció, y le dijo: Jehová está contigo, varón esforzado y valiente.
Jer 30.17 Mas yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová; porque desechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda.
Mt 7.11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?
Ecl 10.18 Por la pereza se cae la techumbre, y por la flojedad de las manos se llueve la casa.
Ecl 12.1-6 Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento;
2 antes que se oscurezca el sol, y la luz, y la luna y las estrellas, y vuelvan las nubes tras la lluvia;
3 cuando temblarán los guardas de la casa, y se encorvarán los hombres fuertes, y cesarán las muelas porque han disminuido, y se oscurecerán los que miran por las ventanas;
4 y las puertas de afuera se cerrarán, por lo bajo del ruido de la muela; cuando se levantará a la voz del ave, y todas las hijas del canto serán abatidas;
5 cuando también temerán de lo que es alto, y habrá terrores en el camino; y florecerá el almendro, y la langosta será una carga, y se perderá el apetito; porque el hombre va a su morada eterna, y los endechadores andarán alrededor por las calles;
6 antes que la cadena de plata se quiebre, y se rompa el cuenco de oro, y el cántaro se quiebre junto a la fuente, y la rueda sea rota sobre el pozo;
Jue 9.4 Y le dieron setenta siclos de plata del templo de Baal-berit, con los cuales Abimelec alquiló hombres ociosos y vagabundos, que le siguieron.
Col 3.17 Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.
2 cor 2.11 para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones.
Mt 28.18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Dn 4.35 Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces?
Fil 4.8,9 Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.
9 Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros.
1 cor 15.57 Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Isa 62.2 Entonces verán las gentes tu justicia, y todos los reyes tu gloria; y te será puesto un nombre nuevo, que la boca de Jehová nombrará.
Isa 45.3 y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre.
Hch 20.35 En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.
1 tim 6.6-8 Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;
7 porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar.
8 Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.
Ezq 33.25,26 Y la mano de Jehová había sido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado.
Pr 30.8,9 Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí;
No me des pobreza ni riquezas;
Manténme del pan necesario;
9 No sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová?
O que siendo pobre, hurte,
Y blasfeme el nombre de mi Dios.
1 tim 4.4 Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias;
Lc 8.16,17 Nadie que enciende una luz la cubre con una vasija, ni la pone debajo de la cama, sino que la pone en un candelero para que los que entran vean la luz.
17 Porque nada hay oculto, que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de ser conocido, y de salir a luz.
Fil 2.15 para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo;
Lc 10.5-7 En cualquier casa donde entréis, primeramente decid: Paz sea a esta casa.
6 Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; y si no, se volverá a vosotros.
7 Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que os den; porque el obrero es digno de su salario. No os paséis de casa en casa.
Hch 5.1-4 Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad,
2 y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles.
3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?
4 Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.
Jos 7.1,11 Pero los hijos de Israel cometieron una prevaricación en cuanto al anatema; porque Acán hijo de Carmi, hijo de Zabdi, hijo de Zera, de la tribu de Judá, tomó del anatema; y la ira de Jehová se encendió contra los hijos de Israel.
11 Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les mandé; y también han tomado del anatema, y hasta han hurtado, han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres.
Hch 10.34,35 Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas,
35 sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia.
amen, amen